Pasé los últimos meses fabricando mis propias tintas, las cuales no siempre salen bien pero aprendo mucho en el proceso. Aunque hoy en día los materiales artísticos son relativamente accesibles y en ciudades grandes como donde vivo, se pueden comprar incluso insumos importados de alta calidad, yo prefiero seguir experimentando.

Por su puesto que no siempre es posible elaborar todos los materiales. El papel, por ejemplo, aunque se puede fabricar de forma casera, requiere ciertas herramientas que ocupan espacio y lugar al aire libre para lograr los tamaños grandes que estoy utilizando.

Por otro lado, las tintas que obtengo son en su mayoría de colores tierra y poco vibrantes. Sin embargo a mi me gusta que la paleta de colores que uso se forme sola, en lugar de tener que elegir los tonos y siempre me queda el recurso de los lápices de colores para sumar acentos de los matices que todavía no logro obtener.

Aunque aprendí a utilizar conservantes y fijadores para que las tintas permanezcan lo más estables posible, es factible sin embargo, que cambien un poco con el correr del tiempo. Al principio esta posibilidad me llevaba a evitar la experimentación, pensando que un trabajo terminado era aquel que nunca cambia.

Pero ahora veo las cosas de otra manera. No me interesa que lo que hago sea inerte, sino todo lo contrario, que esté vivo y se transforme, porque ese cambio no va en detrimento de la obra sino todo lo contrario, le va agregando algo nuevo con el paso de los días. Así el tiempo se transforma en un nuevo material.

Las tintas caseras cambian mucho en los primeros días, luego de aplicadas sobre el papel. Al principio se ven aguadas y transparentes, como si no tuvieran cuerpo. Pero a medida que se secan y se asientan sobre las fibras, van adquiriendo cierta densidad y opacidad. Disfruto mucho de tener los dibujos o manchas a la vista durante esos primeros días en que las tintas van mutando.

Pueden ver los trabajos en tinte que realicé durante este último año y también algunos anteriores en mi catálogo de dibujos.
Todos las obras allí presentadas se encuentran disponibles con la salvedad de que, por el momento, ofrezco estas obras para venta y envío solo dentro de Capital Federal. Cualquier inquietud, siéntanse libres de consultarme por email a infoceciliaborghi@gmail.com​

Ver catálogo de dibujos

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PARA VER

Cultivar algodón es una parte esencial en la historia de la agricultura peruana. Las distintas clases de algodón, oriundas de los Andes Peruanos, se encuentran consideradas entre las más finas fibras en el mundo. Los agricultores peruanos de algodón, localizados tanto en la costa del Pacífico como en los bosques tropicales de la Cuenca del Amazonas han venido cultivado algodón por generaciones; muchos de ellos han heredado una gran cantidad de técnicas indígenas y tradicionales.

Los agricultores utilizan como abono natural el guano de las aves, rico en nitrógeno, fósforo y potasio, recolectado en las islas a lo largo de la costa. El algodón es cosechado a mano en lugar del uso de maquinarias o químicos defoliantes. Para conservar el suelo en forma saludable, los agricultores rotan algodón con cultivos como maíz y frijoles que son comercializados localmente.

Ricardo Galmed maneja una tintorería de tintes naturales dedicada exclusivamente a teñir algodón orgánico producido en el sur de Perú y en este video muestra brevemente el proceso artesanal que utilizan y expresa la razón por la cual elige este método de teñido en lugar de las tinturas químicas. Dura 2 minutos y medio y el audio es en español.

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CUADERNO EN FLOR

En un texto de febrero de 2019 publicado en mi blog, contaba la manera en que creo mis dibujos. Aunque al dibujar mantengo los ojos bien abiertos, intento llevar mi mente lejos de donde estoy.

Comienzo por manchar el papel en blanco o reutilizo, por ejemplo, algún trabajo anterior que no me gustó y descarté pero que, afortunadamente, todavía no llegó a la basura. En ocasiones prefiero borronear o hacer marcas encima para que el dibujo inicial deje de comprenderse. A veces coloco la hoja de cabeza para que el dibujo anterior no acapare la mirada.

Todo este proceso, que puede parecer un poco absurdo, es en realidad lo que me llevó a crear una estética propia y a confiar en que siempre voy a poder encontrar imágenes para plasmar en el papel.

Leer Cómo conciliar un dibujo

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NOVEDADES

Piedras fue una serie de 15 piezas en porcelana y esmaltes de reducción que realicé en el año 2011. Fueron pasando por varias exhibiciones y en el camino algunas encontraron su destino.

Las 5 últimas piezas de esa serie fueron seleccionadas por Carolina Salom para formar parte de su propuesta de diseño funcionalista en CSALOM ATELIER en el barrio porteño de Chacarita. Están a la venta y el espacio puede ser visitado con cita previa.

Ir al IG de CSalom Atelier

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DESTACADA

Collar Semillas​
Dijes de porcelana pigmentada, cordón de algodón teñido con tintes naturales y textil reciclado.
Disponible en la tienda online de PATRÓN CONCEPT STORE​

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